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Mis primeros 25 años en el Sant Martí:
Este año 2009 ha hecho 25 años que fiché por primera vez por Club d’Escacs Sant Martí, un club de un barrio en las afueras de Barcelona, teniendo en cuenta que estuve un año en otro club. En este tiempo ha pasado mucha gente por allí y el mundo ha cambiado mucho. También el juego del ajedrez. Cuando yo federé por el Sant Martí se jugaba con reloges analógicos, el Campeonato de Cataluña Por Equipos se jugaba a 11 rondas de setiembre a diciembre y como no hi había 11 fines de semana, se solía jugar también el 12 de octubre y el 1 de noviembre, con un ritmo de juego con controles de tiempo y sesiones de juego de 6 horas. Las planillas hacían servir un papel de calcar y la gente iba a los clubs por las tardes a jugar porque estaban abiertos, a diferencia de ahora. Había poco dinero, pocos maestros, pocos torneos y relativamente pocos jugadores. Eran frecuentes los matxs amistosos para poder jugar una partida con un jugador de otro equipo, aunque no valiera para ningún elo. Muchos clubs tenían un torneo social, el nuestro aún existe, que no daba ningún premio en metálico. No hi había móviles ni internet, pero la gente quedaba a una hora y se encontraba. Hace poco oí decir a uno de los fundadores que nunca se hubiera pensado que el Club d’Escacs Sant Martí celebrara el 35 aniversario, como lo hace este año, porque inicialment eran unos cuantos aficionados que jugaban en la parte trasera de una farmacia, que más tarde formaron parte, como sección, de la Asociación de Vecinos de Sant Martí de Provençals, hasta su independencia el 26 de diciembre de 1974. Lo que pasa es que una entidad tiene futuro si hay alguien que so la cree y empieza a organizar actividades, a dar clases a los niños, a pedir dinero por las tiendas, a organizar torneos y a pedir subvenciones, entre muchas otras cosas que se pueden hacer. Este es mi modelo de club, una entidad con futuro, dónde es fundamental que la primera vez que una persona va a un club de ajedrez esté abierto, i se encuentre como en casa, como me encontré yo, que se sienta a gusto, tenga el apoyo del resto de personas y a la que se ofrece una serie de oportunidades para aprender a jugar al ajedrez. Porque en una entidad todos los socios son importantes, y no sólo los del primer equipo. Cuando yo era joven tenía ganas e ilusión de aprender ajedrez y cada torneo era una oportunifaf para mejorar. Todo cansa en la vida, y cuando llevas muchos años haciendo una cosa, pues quizás sí he aprendido un poco de ajedrez, pero está claro que ya no juego con la misma ilusión y ganas de cuando era un niño y no entenia gran cosa del juego. Y entonces, qué hago yo en un club de ajedrez después de tantos años? Pues una cosa muy importante, creo, como es su gestión. Las entidades, es igual del tipo que sean, necesitan gente que se preocupe por ellas, que programe actividades con tiempo, que coordine jugadores, que se preocupe de las subvenciones y que vaya a las muchas reuniones a las que te convocan las diferentes administraciones con las que tienes relaciones. En un curso al que asistí una vez, porque la formación de los miembros de las juntas directivas de los clubs de ajedrez es imprescindible juntamente con la experiencia, decían que de la misma forma que hacen las empresas, hacía falta plantearse unos objectivos a 5 años vista e intentar cumplirlos. Los objetivos no tienen por qué ser simplemente económicos, aunque es importante que la entidad tenga dinero para poder organizar activitades, si nó sociales, participando en el movimiento asociativo del barrio. Yo también estoy implicado en entidades ecologistas u ong, porque comparando lo que hacen entidades diversas puedes copiar ideas y aprender de otras personas. Ya sé que a muchos esto que escribo les parecerá ciencia ficción, però así nos va. De hecho yo creo que hay muchos clubs de ajedrez que no hacen nada de esto que escribo más arriba, pero esto no les hace perder socios, porque mucha gente ficha por un club porque lo tiene cerca de casa o porque conoce a alguien de allí, pero no se plantea qué les ofrece la entidad. El hecho es que además de tener que competir con la locura del fútbol, hay muchos clubs de ajedrez muy mal gestionados que no desaparecen por eso y van subsistiendo sin hacer nada por crecer ni dar a conocer sus actividades. Actualmente en el Sant Martí damos clases a los niños de iniciación de lunes a jueves, se hace un curso de alto nivel un día por semana, se organizan sociales de partidas lentas, rápidas y semirrápidas, se hace un torneo para niños, uno para mujeres y otro de semirrápidas y rápidas antes del verano. Participamos en la Fiesta de Sant Jordi haciendo unas partidas simultanias en la calle, igual que en la Fiesta Mayor de Sant Martí. En este año tan difícil económicamente hablando y en el que celebramos nuestro 35 aniversario somos el único torneo que ha entrado en el VI Circuito Catalán de Abiertos Internacionales, organizamos un cerrado de MC y otro de MI que pensamos mantener en el tiempo, más la inauguración de un tablero gigante que nos hará el Ayuntamento delante del centro cívico Sant Martí y la exposición de material de ajedrez de todos los tiempos que sólo organizamos una vez cada 5 años Claro que seguimos en la misma sala de 22 m2 dónde yo me lo he pasado tan bién, igual que hace 25 años, pero eso espero también que cambie algún día. En fín, mi homenage a los que trabajan altruistamente por su entidad. Barcelona, 28 de mayo de 2009
Ricard Llerins
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